Exejecutivo de Activision demanda por discriminación por edad y violación de la ley de protección a denunciantes

Un exejecutivo no identificado de Activision está llevando a la editorial de Call of Duty a los tribunales de California, acusando a la compañía de discriminación por edad y violación de la ley de protección a denunciantes del estado. Este ejecutivo tiene 57 años y trabajó en la compañía desde 2014; al parecer, él y otros seis hombres de 47 años o más fueron despedidos de un equipo de 200 personas como parte de los esfuerzos de reestructuración más amplios de Activision Blizzard en agosto pasado. Según un informe de law360, la demanda cita declaraciones presuntamente hechas por el recientemente salido CEO de Activision Blizzard, Bobby Kotick, según las cuales «hay demasiados hombres blancos mayores» en la compañía, y afirma que dos ejecutivos blancos abandonaron la compañía poco después «como resultado, al menos en parte, de los comentarios de discriminación por edad de Kotick». Según la demanda, uno de los ejecutivos que se marchó recomendó al demandante como su reemplazo, pero Activision Blizzard promovió a un empleado más joven y no blanco, que se convirtió en el jefe del demandante. Se dice que el mencionado gerente criticó el trabajo del demandante de tal manera que el aumento salarial basado en méritos que recibió ese año fue el más bajo que recibió durante su tiempo en la compañía. La demanda también afirma que una mujer del departamento del demandante hizo comentarios falsos y difamatorios sobre él a recursos humanos y su jefe, al mismo tiempo que se quejaba de que su aumento salarial basado en méritos era inferior a lo esperado. El demandante presentó su propia queja a recursos humanos en respuesta, acusando a Activision Blizzard de no protegerlo de «acusaciones discriminatorias y difamatorias» y pidiendo «controles y equilibrios» mientras sostenía que «podría estar surgiendo un problema mayor». Según afirma, esta queja fue ignorada. En resumen, el demandante está pidiendo daños y perjuicios para compensar la pérdida de ingresos, el impacto negativo en el avance profesional, el daño a su reputación, el sufrimiento emocional y el despido improcedente, además de los costos legales. Sobre el papel, gran parte de esto me hace sentir poco compasión. Independientemente de lo que Kotick haya dicho o no haya dicho, no parece que los hombres blancos sean una especie especialmente en peligro en Activision, o en cualquier otro lugar. Según el informe más reciente de Diversidad, Equidad e Inclusión de la compañía, el 73% de la fuerza laboral de la compañía era masculina en 2022, y el 61% de su fuerza laboral en Estados Unidos era blanca. Si hubiera una campaña más amplia contra los hombres blancos en la Casa de COD, la estarían manteniendo bastante en silencio. Me siento más simpático respecto a las acusaciones de discriminación por edad, que es un problema que afecta de diversas formas a una variedad de industrias. En un video del año pasado, Timothy Cain, uno de los diseñadores originales de Fallout, lo llamó «la última discriminación públicamente aceptable» en el desarrollo de juegos (si te gusta ese video, Jeremy Peel también entrevistó a Cain sobre sus días en Fallout y Outer Worlds hace un tiempo). Según una encuesta de CompTIA de 2023, solo el 17% de los trabajadores de tecnología y el 14% de los desarrolladores de software y ingenieros en Estados Unidos tienen más de 55 años. En 2019, Kate Edwards, de la unión de trabajadores de la industria de los videojuegos, lanzó la iniciativa «50 over 50» para abordar un supuesto sesgo generalizado hacia contratar a personas más jóvenes. Me interesaría leer un desglose general por edades de los despidos masivos de la industria del año pasado. Activision aún no ha dicho mucho sobre la demanda por discriminación por edad mencionada anteriormente, más allá de remitir a GamesIndustry.biz a su política de igualdad de oportunidades de empleo. En noticias posiblemente relevantes, la compañía recientemente llegó a un acuerdo en una demanda presentada por el estado de California debido a una supuesta cultura de «chicos de fraternidad» de acoso sexual, discriminación y salarios desiguales.