La Facultad de Ingeniería de la Universidad de Toronto ha logrado un avance significativo en el campo de la tecnología de captura de carbono. El nuevo catalizador desarrollado tiene la capacidad de convertir eficientemente el carbono capturado en productos valiosos, incluso en presencia de contaminantes que se sabe que degradan el rendimiento de los catalizadores actuales.

Este descubrimiento representa un gran paso hacia la creación de técnicas más económicamente viables para la captura y almacenamiento de carbono, que pueden integrarse fácilmente en los procesos industriales existentes. El profesor David Sinton, autor principal del artículo de investigación publicado en Nature Energy, destaca los desafíos que enfrentan industrias como la fabricación de acero y cemento para descarbonizar sus operaciones.

El equipo de investigación de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Toronto utilizó electrolizadores para convertir CO2 y electricidad en productos valiosos como etileno y etanol. Estas moléculas a base de carbono pueden utilizarse como combustibles o como materias primas químicas para la producción de diversos artículos cotidianos.

Resistencia a impurezas

El catalizador recientemente diseñado demostró una notable resistencia a impurezas, específicamente a los óxidos de azufre. Incluso cuando el catalizador fue expuesto a una mezcla de CO2 y SO2, mantuvo una eficiencia de Faraday del 50% durante 150 horas. Este nivel de rendimiento, incluso en presencia de contaminantes, es un avance significativo en el campo de la tecnología de captura de carbono.

El enfoque innovador de la investigación abre posibilidades para la aplicación generalizada de recubrimientos similares para conferir resistencia a la intoxicación por óxidos de azufre. Si bien los óxidos de azufre plantean un desafío significativo, el equipo tiene como objetivo explorar el impacto de otros contaminantes químicos en los flujos de desechos en el rendimiento del catalizador.

Con este avance, la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Toronto ha logrado desarrollar un catalizador resistente para la captura de carbono, lo que representa un avance significativo en el campo de la tecnología sostenible. Esta innovación no solo supera las limitaciones de los catalizadores actuales, sino que también demuestra el potencial de crear soluciones de captura de carbono más económicamente viables para aplicaciones industriales.

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