Las aerolíneas no estarán reemplazando a los pilotos con inteligencia artificial en el corto plazo, pero los expertos de la industria de la aviación dicen que la nueva tecnología ya está revolucionando la forma en que hacen negocios. Julie Pozzi, la jefa de ciencia de datos e IA en Air France-KLM, afirmó que «los datos y la IA son palancas fantásticas para el sector de la aviación» antes de la 80a reunión de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) en Dubai.
Los ejecutivos de aerolíneas se reunirán en la influyente cumbre anual de aerolíneas globales en los Emiratos Árabes Unidos para hablar sobre lo último en la industria, incluidos los próximos proyectos de inteligencia artificial. Las empresas de aviación, acostumbradas durante mucho tiempo a márgenes de beneficio reducidos, ven la IA como la forma más nueva de aumentar la productividad y obtener una ventaja competitiva.
Air France-KLM está llevando a cabo más de 40 proyectos usando inteligencia artificial generativa. Entre los planes de la compañía franco-holandesa se encuentra una herramienta que responde a los clientes en 85 idiomas diferentes, que se instalará en las tabletas de los agentes de Air France y que está programada para usarse en 2025 en el aeropuerto de Charles de Gaulle en París. El operador del aeropuerto, Groupe ADP, también ha lanzado varias iniciativas de IA en cooperación con startups, incluido Allobrain, que utiliza reconocimiento de voz para responder a llamadas telefónicas al aeropuerto. Ha reducido «el número de llamadas telefónicas no contestadas del 50 por ciento al 10 por ciento», dijo Alban Negret, jefe de la división de innovación de ADP.
A medida que el sector de la aviación crece, reducir los tiempos de espera es uno de los desafíos importantes, según el experto en aeroespacial Jerome Bouchard. Los aviones modernos, con sus sofisticados sistemas de auto diagnóstico y control, son fábricas de datos que pueden aprovecharse con IA, según los expertos. Pero cuando se trata de pilotar el avión, afirman que no hay duda de dejarlo en manos de los algoritmos. En última instancia, «es responsabilidad de los humanos tomar decisiones», dijo el CEO de Thales, Patrice Caine, en marzo.
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